El seleccionado argentino de fútbol para ciegos, Los Murciélagos, se quedó el pasado domingo con el subcampeonato mundial luego de caer por 2-0 frente a Brasil en la final de la Copa del Mundo que se llevó a cabo en Madrid. De esa manera, el representativo nacional, dirigido por Martín Demonte, Claudio Falco y Germán Márquez, cerró una excelente participación, demostrando toda su jerarquía colectiva e calidad individual, llegando a la sexta final en siete Mundiales.
Lucas Rodríguez:
¿Cómo fue la final ante Brasil?
Creo que jugamos muy bien, estamos muy contentos con lo que pudimos hacer en cancha, jugamos de igual a igual y creo que por pasajes del partido fuimos superiores. Ellos en dos jugadas aisladas individuales marcaron la diferencia, pero felices de lo que se dejó en la cancha. Estamos en un excelente nivel y a seguir trabajando, seguir progresando porque esto tiene que ser el piso para seguir mejorando de acá al futuro para los próximos torneos que nos toquen jugar.
¿Qué les queda de acá en adelante?
Ahora compartir esto con la familia y la gente de Córdoba y de Argentina que nos ha estado siguiendo. Es la primera vez que se transmiten los partidos nuestros y me dijeron que más de 3 millones de argentinos han visto fútbol de los Murciélagos, entonces es un motivo de alegría y ojalá sirva para que muchas personas se sigan sumando al fútbol de ciegos.
Nicolás Véliz:
¿Qué sensaciones te dejó el Mundial?
Y un poco de sensaciones encontradas, por un lado, la alegría de haber jugado un Mundial, de haber representado al país y de haber dejado todo desde el minuto 0 hasta el último minuto de la final. Uno como deportista siempre quiere ganar y nos queda ese sabor amargo de la final que no se nos dieron las cosas, pero son cosas del fútbol y por ese lado, uno se queda con las ganas de haber traído la copa.
¿Cómo fue el partido ante Brasil?
Fue un partido muy parejo, muy estudiado con dos equipos que se conocían mucho, fue un partido muy táctico y en el primer tiempo tuvimos las ocasiones más claras nosotros y se abrió en el segundo tiempo con una genialidad de Ricardinho.
Maximiliano Espinillo:
¿Qué sensaciones te dejó el Mundial?
Mucha felicidad, mucha tranquilidad porque se hizo lo máximo, como deportistas quedamos vacíos en la final y lamentablemente no se pudo traer la copa que era el sueño, por lo que habíamos trabajado. Hay que seguir trabajando, principalmente ahora descansar y después a renovar energías para enfrentar los torneos que vienen ahora con la Selección.
¿Qué significó para ustedes jugar la final contra Brasil?
Y la verdad que es un clásico a nivel mundial y en cualquier deporte le queremos ganar y esta vez no se pudo, el año pasado lo pudimos lograr y ahora hay que seguir trabajando para ganarle en el próximo torneo el año que viene.
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